El Espíritu Santo de Dios, nos ha sido dado a nosotros por El Padre y el Hijo, para que esté con nosotros hasta el fin del mundo, para ayudarnos en nuestras luchas contra el pecado y la muerte, las cuales tenemos que enfrentamos a cada momento de nuestra existencia, como consecuencia de haberle fallado a Dios desde un comienzo, al desobedecerle y apartarnos de El y sus mandamientos.
Pero Dios siempre tiene otro plan elaborado para ir en nuestra ayuda, y hoy la verdad de Dios, para los que creemos, es que Dios mediante su Espíritu Santo, nos ha prometido liberación del pecado y la muete, veamos:
ROMANOS
5:19 Porque asi como por la desobediencia de un hombre (Adan y Eva), los muchos fueron constituidos pecadores, asi también por la obediencia de Uno (Cristo Jesús), los muchos serán constituidos justos.
8:2 Porque la ley del Espíritu de Vida en Cristo Jesús ME HA LIBRADO DE LA LEY DEL PECADO Y DE LA MUERTE.
8:3 Porque lo que era imposible para la ley, por cuanto era débil por la carne, Dios, enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne.
EFESIOS :
6:10 Por lo demás, hermanos mios, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza. -11- Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo.
REFLEXION :
Estamos luchando sólos contra el Pecado ?? Pues déjame decirte que nosotros solos, no vamos a poder ganar esa batalla, necesitamos la ayuda, la guía, la fortaleza, el poder del Espíritu Santo en nuestras vidas, para poder triunfar, y es más, ya la batalla fué ganada para nosotros por medio de Cristo Jesús, lo que debemos hacer nosotros es rendirnos a El, y pedirle que nos dé su gracia , poder y sus dones , para que tomemos esa fortaleza disponible para nosotros para obtener la victoria que ya es nuestra. QUE NOS LLENE DE SU PRESENCIA. Oremos:
PADRE : Te bendecimos te adoramos venimos hoy con un corazón contrito y humillado ante tí, pidéndote que nos des de tu poder y gracia ya provista para nosotros para recibir esa promesa de ser librados del pecado y de la muerte, te lo pedimos en el nombre de Jesús. Amén .
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